El director de la Fundación Santillana reconoció el papel clave de las nuevas tecnologías en el cierre de brechas. Recordó, sin embargo, que el centro de todo esfuerzo por mejorar la calidad educativa debe tener siempre como centro a las personas.
Martín Colombo, director de la Fundación Santillana en Colombia, asegura que todo proyecto de mejoramiento del sistema educativo colombiano debe articularse con las nuevas tecnologías, y particularmente la inteligencia artificial, no solo como herramientas fundamentales en las dinámicas de un aula de clase, sino esenciales para acortar las brechas que existen en términos de calidad de la formación.
Para el ejecutivo, sin embargo, es importante tener muy clara la razón para la cual se va a integrar cada desarrollo tecnológico al sistema educativo. Un primer paso, agregó en el marco de El Futuro de la Educación, es entender el rol del docente como un agente sensibilizador que debe formarse en el uso de las mismas para que este, a su vez, pueda equipar a los estudiantes con herramientas y capacidades transformadoras.